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¿Qué es la deforestación?
La deforestación es un proceso provocado por los humanos, en el que se destruye o agota la superficie forestal, generalmente con el objetivo de ocupar los suelos para otra actividad. Es decir, que acabamos con los árboles para usar ese espacio para otros motivos, como la agricultura, el pastoreo o la construcción de ciudades.
Está directamente relacionada con las actividades industriales, como la tala y la quema para la expansión de las fronteras agrícolas para dar lugar a la agricultura intensiva y a la ganadería.
La expansión de las áreas urbanas y las actividades mineras también son una razón fuerte para impulsar la deforestación. La construcción de carreteras y vías de acceso a bosques cada vez más remotos mediante la tala agresiva contribuye a la deforestación.
En menor medida, la agricultura de subsistencia también está involucrada en estas actividades.
La deforestación tiene un impacto directo en el calentamiento global actual, pues se estima que la deforestación y otras prácticas agrícolas contribuyeron, en las décadas pasadas, con alrededor del 20% de las emisiones de dióxido de carbono a nivel global.
La deforestación es un problema muy grave, ya que destruye la calidad de los suelos, contribuyendo a la erosión y a la desertificación, aumentando la liberación de polvo mineral y ocasionando así las tormentas de arena; además, los ecosistemas forestales actúan como sumideros de carbono y desempeñan un papel crucial en la absorción de gases de efecto invernadero, por lo que la deforestación tiene un impacto adverso en la fijación de dióxido de carbono (CO2).
Productos para evitar la deforestación
Como ya sabemos, el problema es sistémico, pero también podemos poner nuestro granito de arena con algunos productos que disminuyen la deforestación. Te agregamos los enlaces para su compra:
Antes de leer a profundidad las causas y las consecuencias de la deforestación, observa este video sobre el tema, para tomar consciencia de lo que le estamos haciendo al planeta.
Causas de la deforestación
Son las fuerzas que motivan la destrucción de la cubierta forestal. Es decir, las razones por las que los humanos realizamos la acción de deforestar.
Existen causas directas e indirectas de la deforestación. Las causas directas se conocen como fuentes de la deforestación, causas de primer nivel o causas próximas o aledañas. Son las más fáciles de identificar. Las causas indirectas son las principales fuerzas de la deforestación, pero existe un desacuerdo sobre ellas y son más difíciles de cuantificar.
Causas Directas
Se basan en la competencia entre los humanos y otras especies por los nichos ecológicos remanentes en la tierra y en las regiones costeras. Este factor se caracteriza por la conversión de los bosques a otros usos, tales como la agricultura, infraestructura urbana, desarrollo de carreteras o la industria.
Causas Indirectas
Se refieren a causas que provocan la deforestación. Tienen que ver con el modo de producción capitalista y sus fallas en los sistemas económicos para reflejar el valor real del ambiente. Se da un valor menor a la tierra del que en verdad tiene, poniendo por delante la generación del dinero.
Algunas de estas causas son:
Aumento de precios
Existe suficiente evidencia de que un aumento en el precio de los productos agrícolas estimula la deforestación. Un estudio de 1987 que analizó 58 países encontró una correlación entre el área de cultivo total y el precio de los productos generados.
El único caso donde no hay correlación entre el precio de los productos agrícolas y la deforestación es cuando la producción agrícola es agricultura de subsistencia. Cuando los agricultores están buscando maximizar sus ganancias, la correlación entre precio y deforestación aumenta.
Expansión de la actividad agrícola
Alrededor de 60% de la deforestación se produce para convertir las tierras en lugares útiles para la agricultura.
La agricultura itinerante, o también de tala y quema, destruye los bosques para hacer crecer los cultivos hasta que los nutrientes del suelo se agotan o la tierra se llena de malezas, lo que ocasiona que las poblaciones se movilicen para encontrar nuevas áreas e iniciar el proceso de deforestación.
La producción de pequeños terratenientes y el número creciente de agentes practicando la agricultura itinerante fueron la causa principal de la deforestación en el pasado. En la actualidad, la proporción de la conversión de bosques a tierras agrícolas está aumentando y la agricultura itinerante está disminuyendo.
Forestación
Las plantaciones, en el papel, deberían ayudar a reducir la tasa de deforestación, sin embargo, el hecho de que las plantaciones ejerzan más presión sobre el bosque para la producción de madera no se traduce en menos deforestación, al contrario, la aumentan.
Las plantaciones de madera contribuyen al detrimento de los ecosistemas tropicales. Los cultivos de árboles y, en particular, las plantaciones de caucho, por ejemplo, juegan un rol importante en la deforestación en Indonesia, incluso más que la agricultura itinerante de subsistencia.
Alrededor de la mitad de las plantaciones establecidas en áreas tropicales lo hacen sobre tierras donde anteriormente existían bosques nativos. Además, las plantaciones también pueden promover la deforestación mediante la construcción de carreteras que mejoran el acceso a otros agentes de deforestación, como los agricultores itinerantes.
Explotación forestal y leña
La recolección de leña y otros combustibles derivados de la madera a menudo se concentra en los bosques secos tropicales y en áreas forestales degradadas.
La recolección de leña no es, usualmente, la principal causa de deforestación en los bosques húmedos tropicales, aunque puede serlo en aquellos lugares con áreas forestales reducidas como las Filipinas, Tailandia y partes de América Central. La recolección de leña era considerada como la principal causa de deforestación y degradación forestal en El Salvador.
Incendios forestales
El fuego es una herramienta muy utilizada para la destrucción de bosques, dando paso a la conversión de la tierra, tanto para agricultura permanente como para el desarrollo de pastizales. Es una herramienta útil en la agricultura y la gestión de los bosques, pero también puede ser una causa de la deforestación.
A partir de los datos disponibles de más de 118 países representando 65% del área forestal global, un promedio de 19.8 millones de hectáreas o 1% de todos los bosques fueron reportados como significativamente afectados cada año por incendios forestales. La deforestación debido a la pavimentación de carreteras en Brasil, por ejemplo, también llevó a incidentes más frecuentes de incendios forestales.
Observa ahora este video sobre los Incendios forestales y sus causas más comunes:
Consecuencias de la deforestación
Las consecuencias de la deforestación las podemos sentir tanto en el agua, en el aire como en la Tierra.
En el Aire
La deforestación es una de las principales causas del efecto invernadero y el calentamiento global.
La pérdida de los bosques tropicales es responsable de aproximadamente del 20% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
En las áreas deforestadas, el terreno se calienta más rápido por efecto del sol y alcanza una mayor temperatura, lo que lleva a mayores corrientes de convección ascendentes que favorecen la formación de nubes y finalmente producen más lluvia. Sin embargo, de acuerdo con el Laboratorio norteamericano de Dinámica de Fluidos Geofísicos (GFDL por sus siglas en inglés), los modelos utilizados para investigar los efectos a gran distancia de la deforestación tropical mostraron un amplio, pero suave, incremento de la temperatura en toda la atmósfera tropical.
La deforestación afecta a los vientos, el vapor de agua y la absorción de energía solar, influyendo así claramente en el clima zonal y mundial. Por ejemplo, la deforestación de un área puede aumentar las tormentas de arena en zonas colindantes.
Efectos en el Agua
La deforestación también afecta al ciclo del agua: los árboles extraen agua del subsuelo a través de sus raíces y la liberan a la atmósfera. Cuando desaparecen, el clima se vuelve más seco. Además, la deforestación reduce la cantidad de agua en el terreno y en el subsuelo, de modo que las plantas restantes ven reducida su disponibilidad de agua. Asimismo la deforestación reduce la cohesión del suelo, lo que da lugar a erosión, inundaciones, desertificación y corrimientos de tierra.
Los árboles, y las plantas en general, inciden significativamente en el ciclo hidrológico:
- Sus copas interceptan una porción de la precipitación, que luego se vuelve a evaporar.
- Sus residuos en el suelo (hojas muertas, ramas) frenan el agua de lluvia.
- Estos residuos también cambian las propiedades del suelo, mejorando su capacidad de retener agua.
- Sus raíces crean macroporos que incrementan la filtración al subsuelo.
- Contribuyen a la evaporación terrestre y reducen por transpiración la humedad del suelo.
- Controlan la humedad del aire a través de la transpiración de sus hojas. El 99% del agua absorbida por las raíces es transpirada.
Como resultado, la presencia o ausencia de árboles cambia la cantidad de agua subterránea, superficial o atmosférica. Esto cambia también el ritmo de erosión y la disponibilidad de agua, ya sea por el ecosistema o para las necesidades humanas. La deforestación de las llanuras traslada la formación de nubes y la lluvia a terrenos más elevados.
En el caso de lluvias muy intensas y prolongadas que rebasen la capacidad normal de absorción de los bosques, es posible que, a pesar de su presencia, se produzcan inundaciones.
Es importante considerar que la selva tropical es la fuente de alrededor del 30% del agua dulce del planeta.
Por todo lo anterior, hacemos hincapié en que la deforestación altera los patrones climáticos favoreciendo un tiempo más cálido y seco, y por tanto incrementando la sequía, la desertificación, la pérdida de cosechas, la fusión de los polos, las inundaciones costeras y el desplazamiento de flora y fauna.
Afecciones a la Tierra
Los bosques naturales tienen un ritmo de erosión muy bajo, aproximadamente dos toneladas métricas por kilómetro cuadrado. Los cual es asimilable por el medio ambiente.
En cambio, la deforestación incrementa el ritmo de pérdida de suelo al aumentar la escorrentía (la lluvia que recorre libremente el lugar) y reducir el escudo de residuos vegetales. Las propias operaciones de tala incrementan la erosión por la construcción de carreteras y el uso de maquinaria pesada.
Por ejemplo: La Meseta de Loess en China fue despojada de sus bosques originales hace milenios. Desde entonces ha estado erosionándose, creando profundas zanjas, proporcionando el sedimento que da al río Amarillo su color característico y favoreciendo las inundaciones en su curso bajo.
Las raíces de los árboles cohesionan el suelo y, si es lo suficientemente superficial, lo mantienen en su lugar ligándose a la roca madre. Por esta razón, talar los árboles de laderas empinadas con suelo superficial puede incrementar el riesgo de corrimientos de tierras y amenazar las vidas de quienes residen cerca.
Destrucción de Ecosistemas por la Deforestación
La deforestación disminuye la biodiversidad y es causa de la extinción de muchas especies. Más de la mitad de las especies de plantas y animales terrestres viven en las selvas tropicales., por lo que la pérdida de estas áreas ha resultado en un entorno degradado, con menor biodiversidad
Se estima que cada día estamos perdiendo 137 especies de plantas y animales (incluidos insectos) debido a la deforestación de las selvas, lo que supone 50,000 especies anuales.
Modificación de la vida humana a causa de la Deforestación
Como una de las tantas paradojas debidas a nuestras acciones irresponsables como humanidad, la Deforestación hace que tengamos que cambiar nuestro estilo de vida.
La deforestación ocasiona que se propaguen virales o infecciosas, o que enfermedades que están controladas por los bosques se expandan con mayor rapidez e intensidad.
Una revisión de literatura científica en 2007 reveló que existe una relación entre la deforestación y la malaria. Otro estudio científico en 2010 demostró que un 4% de deforestación en la selva amazónica en Brasil llevó al incremento de 43% en los casos de malaria.
Medidas contra la deforestación
Leyes ambientales de protección de los bosques
Diversos países han implementado leyes de protección de los bosques, como las “leyes de bosque nativo” implementadas por Argentina y Chile.
Reforestación
La reforestación es una operación en el ámbito de la silvicultura destinada a repoblar zonas deforestadas en el pasado histórico reciente (se suelen contabilizar 50 años).
Por extensión, también se llama reforestación, aunque sería más correcto el término forestación, a la plantación más o menos masiva de árboles, en áreas donde estos no existieron, por lo menos en tiempos históricos recientes (igualmente, unos 50 años).
También se llama reforestación al conjunto de técnicas que se necesitan aplicar para crear una masa forestal, formada por especies leñosas.
Para que la forestación sea una medida efectiva contra la deforestación no se debe hacer con fines económicos, es decir, no se debe plantar para después talar.
Mejor manejo de la Tierra
Como ya hemos visto en este curso, el sistema de producción, del que todos somos partícipes es la causa de los problemas ambientales, por lo que podemos afirmar que transferir la propiedad de los terrenos donde se ubican los bosques a las poblaciones indígenas es una manera eficiente de protegerlos.
Lo anterior incluye la protección de tales derechos cuando las leyes existentes los conceden, como en la ley india de bosques. Por ejemplo, se sabe que transferir estos derechos en China, quizá la mayor reforma agraria de la edad contemporánea, ha incrementado la cobertura forestal. En Brasil, las áreas forestales cuya propiedad se ha transferido a pueblos indígenas sufren menos tala permanente que incluso los parques nacionales.
Temario del curso
Deforestación