Desde la misma posición en donde terminamos, quien proporciona el masaje debe levantar la rodilla derecha en escuadra, iniciar con rodamientos desde la cadera y hacia los hombros. Vamos a tomar con ambas manos, usando los pulgares y digitales, un pliegue al costado izquierdo de la columna y desplazar ese pliegue con pequeños pellizcamientos sin lastimar hasta los hombros del usuario. Realizamos de la misma manera los rodamientos del lado izquierdo de la columna y repetimos la maniobra tres veces por cada lado.
En la misma posición, realizar fricciones con pulgares, colocando ambas manos extendidas en la cadera y avanzando hacia los hombros, del centro hacia los costados abarcando toda la columna. La presión que se ejerce es media y firme con los pulgares. En caso de que el usuario lo solicite, elevar o disminuir la presión. Realizar la maniobra en una ocasión.
Sin cambiar de posición, realizar deslizamientos con tenares de la mano, colocando ambas manos en la cadera y avanzando hacia los hombros, del centro hacia los costados abarcando toda la columna. La presión que se ejerce es media y firme. En caso de que el usuario lo solicite, elevar o disminuir la presión. Repetir la maniobra dos veces.
Es de suma importancia jamás realizar ninguna maniobra sobre las vértebras, de ser necesario, antes de iniciar con esta zona, hay tocar la espalda para identificar dónde se encuentran las vértebras del usuario y tener la precaución de no lastimarlo.
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